martes, 19 de marzo de 2013

Dueles

Odio más que nada en este mundo expresarme, pero aún así lo hago para así sentirme mejor, también te odio a ti pero prefiero quererte y así sentirme mejor. ¡Irónico, todo es tan irónico! Podría tirarme a cualquiera pero prefiero imaginarme cómo la besas y lo mal que te sabe al pensar en mí. Así es más divertido, todo con dolor de por medio es más divertido, ¿no crees? Ver desde ahí arriba como alguien se desploma por un estúpido 'No siento lo mismo' es entretenido, y más cuando te toca vivirlo en primera persona, te entran unas terribles ganas de gritar y de ser la persona más fría y egoísta sobre la faz de la tierra.

Por última vez:
Sal de mi vida, dueles. 

Perdida

¿Sabes.. sabes como me siento? Como aquel suicida que no puede permitirse la muerte, como aquel que sufre depresión y no puede llorar, como aquella anorexica hambrienta que no puede comer, como aquel que sufre insomnio tras un duro día de trabajo pero no puede descansar.
Exactamente así. Como si estuviese haciendo las cosas correctamente pero no fuese suficiente, como si faltase algo, como si cada paso que diese lo diese por obligación y no por placer, como si no disfrutase de mis decisiones, como si me llevase la contraria a mí misma. Y es que vivimos en un puto mundo de contradicciones tan jodidamente extrañas que una ya se pierde.

Colócame este desorden

 '¿Qué tal?'
¿Que qué tal? Ni bien ni mal, ni viva ni muerta, ni feliz ni triste. Qué difícil es contarle a los demás cosas sobre ti, ¿eh? Sentarme mientras me miran fijamente como si fuese una muestra de antimateria en un laboratorio científico nunca me resultó tan incómodo. Intento escoger las palabras adecuadas, pero se escapan. Se escapan y vuelan a mi alrededor, no puedo seleccionarlas, las letras se invierten mientras pretendo pronunciarlas y constantemente me pregunto por qué abrí la boca. No sé expresarme, no sé hablar, no sé nada. Me cuestiono seriamente si seguiré así por mucho tiempo, ¿es esto crónico, doctor? ¿algún día se curará este desorden? Yo antes no era así, se lo juro, yo antes era una persona normal. Y quiero volver a serlo, quiero volver a circular por la carretera de la normalidad sin desviarme un solo centímetro.

sábado, 2 de marzo de 2013

Errores con olor a tabaco

Camino por las calles de una psicodélica Barcelona cualquier sábado noche y prendo fuego a este cigarro que se consume al ritmo de la rota voz de Dickinson. Sigo firme, adelante, sin rumbo, mientras unos me miran y otros me ignoran. Como siempre. Nada ha cambiado, ni siquiera mi inestabilidad emocional se ha movido de su sitio. Y es que quizás esta mueca de indiferencia aleje toda la mierda, quizás esta capa de frío me proteja del mundo exterior. O quizás esté muerta.Ya sabes, mi cuerpo aún no ha llegado a descomponerse como lo hicieron mis sentimientos meses atrás. Ni siquiera recuerdo con claridad si algún día tuve sentimientos. Tan solo recuerdo borrosamente tus '¡Sal de mi vida, joder!'.. Gracias a Dios conseguí salir entera de tu vida, de ese enorme error que sueles llamar vida. Ese error en el que participé inconscientemente.
Ahora, estaría bien que vinieras a perderte conmigo en estas jodidas calles llenas de drogadictos y prostitutas. Y luego, cogidas de la mano paseando por cualquier estúpido sitio que consideres romántico, que me volvieras a gritar que saliera de tu vida. Seguramente no podrías porque sabes que fui el error más bonito de tu vida.